miércoles, 20 de julio de 2011

Muerta para el mundo.

En una mañana invernal, la nieve cubre la luz del día silenciosamente. Eva deja su casa de Swanbrook, un corazón tan amable que jamas existió. Me avergüenzo de mi mismo, ella camina sola pero no sin un nombre.Vuela lejos en sueños de un mundo lejano en este cruel juego de niños. No hay amigos que digan su nombre, ella esta sola.Un hombre se a mofado hasta la profundidad de la vergüenza, una pequeña niña con toda su vida por delante y sin un futuro. Para escuchar una palabra amable ella daría lo que fuera, tanto que se quedaría entre las bestias esperando para un sueño mas atrevido. Y se pregunta ¿A dónde han ido todos los sentimientos? ¿Por qué toda la risa ha cesado? ¿Por qué tampoco soy amada cuándo me he ido? ¿Cómo podré volver a sentir otra vez? ¿Teniendo la oportunidad volvería? ¿Por qué es el pecado mortal amar como los he amado?Ahora sin bendición, nostálgica en el tiempo, a punto de ser eximida de compasión, del dolor humano. Mi enseñanza es la más amarga verdad, el tiempo nos paga, excepto con la tierra y el polvo, y una oscura, silenciosa tumba.

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